Un cierre de empalme, es un accesorio ampliamente utilizado en las redes de fibra óptica, para resguardar las fusiones que se realizan, protegerlos de las condiciones climáticas que van desde los -18 °C hasta los 40°C.
Los cierres de empalme son útiles para almacenar cable, siendo de gran ayuda si se cometen errores al empalmar o si es necesario hacer una reparación, también permite el movimiento de la fibra óptica debido a cambios térmicos.
Existe una gran variedad de cierres de empalme dependiendo la cantidad de fusiones que se necesitan, el tipo de instalación, la protección al ingreso (IP) y el número de puertos.
La mayoría de las instalaciones se realizan en exterior y se debe de tener una protección de IP65, en instalaciones en registros subterráneos IP68.
Las clasificaciones IP (o “Ingress Protection”) se definen en la norma internacional EN 60529 (BS británica EN 60529: 1992, IEC europea 60509: 1989). Se utilizan para definir niveles de efectividad de sellado de equipos electrónicos contra la intrusión de cuerpos extraños (herramientas, suciedad, etc.) y la humedad.
El número de puertos se refiere a la cantidad de entradas y salidas del cierre. Es importante tomar esto en cuenta al momento de seleccionar un cierre de empalme, ya que el número de puertos determinará la cantidad de derivaciones posibles y la posibilidad de futuras ampliaciones.
Tipos de cierres de empalme
Domo: Los cierres domo (cierres verticales) permiten que los cables entren al cierre desde un solo extremo. Estos cierres se pueden utilizar en una variedad de aplicaciones, incluyendo empalme de derivación.
Horizontal: Los cierres de empalme horizontales de FUSIONGUARDⓇ proporcionan la entrada y salida de cables en ambos extremos del cierre. Se pueden utilizar en una variedad de aplicaciones que incluyen el empalme de las fibras y el acceso del cable tensado.
FTTX: Los cierres FTTx, también conocidos como cierres de última milla, permiten realizar la última derivación en la cual se conecta la acometida.
Estos cierres son ideales para el uso de cables de acometida para redes FTTh. Pueden contar con módulos para Splitters y también se pueden adecuar acopladores para un rápido y fácil acceso.
¿Cómo elegir un cierre de empalme adecuado?
El primer punto que se debe de verificar es la cantidad de fusiones que se va a realizar y así corroborar si el cierre de empalme lo soporta, posteriormente se tiene que revisar el número de puertos y la cantidad de cables de fibra óptica que van a entrar y/o salir del cierre.
Otro factor que hay que tomar en cuenta es el tamaño de los puertos y el diámetro de la fibra óptica que vamos a fusionar, por ejemplo si el cierre tiene puertos que aceptan cables de fibra óptica de 8/20 mm, pero el cable mide 10.1 mm de diámetro, se podrá realizar la instalación sin ningún problema.
También se tiene que corroborar que el cierre de empalme soporte el sitio de la instalación que se necesita y que este incluya los accesorios para esto, existen cierres que se sujetan en cables aéreos, pared, poste o incluso enterrados directamente.
Para una instalación de planta externa, los cierres deben de cumplir con ciertas características para poder soportar distintas condiciones ambientales.
Las instalaciones por encima del suelo pueden ser las siguientes:
Los cierres de planta interna son instalaciones bajo techo y proporcionan protección a los cierres de empalme ante lluvias, viento y nieve.
Por último se tiene que revisar para qué propósito se va a utilizar, puede ser que solamente se utilice para dar continuidad al cable de fibra óptica, sangrar una o varias fibras de un cable troncal a un cable de distribución o la podemos usar como NAP (Punto de Acceso a la Red) por su siglas en inglés.
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